En el mundo de la literatura, existen corrientes y movimientos que han marcado pauta en diferentes épocas. El Realismo y el Postmodernismo son dos de estos movimientos que han dejado huella en la historia de la literatura. Ambos movimientos surgieron en momentos históricos diferentes y tienen características particulares que los diferencian, pero, ¿en qué se parecen? ¿dónde se encuentran? En este artículo profundizaremos en el Realismo y el Postmodernismo para tratar de responder esta pregunta.
El Realismo surgió en el siglo XIX como una respuesta a la romantización de la literatura. Los escritores realistas buscaban retratar la realidad tal y como era, sin adornos ni exageraciones. Por esta razón, en el Realismo encontramos una fuerte crítica social en la que se reflejan las desigualdades y los problemas que afectaban a la sociedad en aquel momento. Además, el Realismo se caracteriza por un lenguaje sencillo y claro, que busca acercarse al lenguaje cotidiano. Algunos de los autores más representativos del Realismo son Gustave Flaubert, Fiódor Dostoyevski, León Tolstói y Émile Zola.
El Postmodernismo, por otro lado, surge a finales del siglo XX como una respuesta al Modernismo y su enfoque en la objetividad y la razón. El Postmodernismo pone en duda la idea de la objetividad y la verdad única y propone una realidad fragmentada y subjetiva. En el Postmodernismo se ve una mezcla de estilos y géneros, se rompen las estructuras narrativas tradicionales y se utilizan recursos como la intertextualidad y la parodia. Algunos de los autores más representativos del Postmodernismo son Jorge Luis Borges, Thomas Pynchon y Paul Auster.
Después de haber visto las características del Realismo y el Postmodernismo, podría parecer que estos dos movimientos están en las antípodas, que no tienen nada en común. Sin embargo, algunos expertos señalan que hay ciertos puntos de encuentro entre ambas corrientes.
Uno de los puntos de encuentro entre el Realismo y el Postmodernismo es la importancia que le dan ambos movimientos a la experimentación y la innovación. En el Realismo, esta experimentación se centra en la exploración de nuevos temas y la utilización de nuevos recursos, mientras que en el Postmodernismo la experimentación se centra en la deconstrucción y la reconstrucción de las estructuras narrativas tradicionales.
Otro punto de encuentro es la crítica social que se ve en ambos movimientos. Aunque en el Postmodernismo esta crítica social no se presenta de manera directa, sino que se encuentra implícita en la deconstrucción de la realidad y de las estructuras sociales.
En definitiva, el Realismo y el Postmodernismo son dos movimientos que surgieron en momentos históricos y culturales diferentes y que tienen características y objetivos particulares. Si bien en un primer momento podrían parecer movimientos opuestos, en realidad tienen ciertos puntos de encuentro, como la importancia que le dan ambos movimientos a la experimentación y la innovación, y la crítica social que se encuentra en ambos movimientos. En cualquier caso, lo que queda claro es que tanto el Realismo como el Postmodernismo han dejado una huella importante en la literatura y que seguirán siendo objeto de estudio e inspiración para las generaciones futuras.